De Jehová soy testigo.

En 1980, como estudiante de primer año en la Universidad Estatal de Michigan, me pidieron que tradujera tratados bíblicos cortos al español. Uno de esos tratados era sobre un hombre que abandonó la secta de los testigos de Jehová. Su historia fue básicamente esta:

1.              Estaba buscando a Dios y se unió a la secta de los testigos de Jehová.

2.              Al principio, lo encontró atractivo porque había un sentido de familia dentro del grupo con el que se reunió.

3.              Quería aprender todo lo que pudiera acerca de Dios, y aprendió que había un solo Dios, y que debía ser referido como Jehová.

4.              Después de unos meses, se le instruyó que se separara de amigos y familiares que no eran Testigos; debía encontrar todas sus relaciones dentro del Salón del Reino al que asistía. (Salón del Reino se usa en lugar de "iglesia").

5.              También se le instruyó que no leyera la Biblia aparte de la literatura que se le dio; Se prohibió cuestionar la enseñanza de los testigos de Jehová.

6.              Se convirtió en anciano y, finalmente, en supervisor.

7.              A medida que ascendía en la secta, comenzó a cuestionar algunas de sus enseñanzas y prácticas.  Le parecía que las amenazas de disciplina y expulsión del Salón del Reino eran bastante severas solo por cuestionar sus creencias. Comenzó a buscar respuestas en la Biblia y aunque estaba usando la Traducción del Nuevo Mundo llena de errores de la Atalaya pronto se dio cuenta de que había muchas contradicciones entre sus prácticas y la misma Biblia que usaban.

8.              Pronto aprendió que estas preocupaciones no eran exclusivas de él; otros que tenían estas preocupaciones, sin embargo, enterraron estas preguntas porque no querían ser excomulgados.

9.              Llegó a un punto en el que no podía negar que las enseñanzas y prácticas de los testigos de Jehová eran contrarias a la Biblia.

10.           Dejó a los testigos de Jehová y llegó a conocer a Jesucristo; la verdad de la Biblia lo liberó.

Muchos de los miembros de los Salones del Reino locales fueron una vez miembros de denominaciones cristianas, como bautistas, metodistas e iglesias pentecostales. Estos tienden a ser personas que no echaron raíces profundas en la iglesia local o en la Biblia. Fueron fácilmente influenciados en el grupo. No debemos subestimar el poder de las relaciones cuando se trata de este grupo.

El celo por sus enseñanzas es otro sello distintivo que es atractivo.  Un miembro típico asistirá al menos a cinco sesiones de enseñanza del Salón del Reino por semana. Asisten a la charla pública los domingos y al Estudio de la Atalaya después. También tienen la Escuela del Ministerio Teocrático durante la semana. Además de estos estudios, se espera que el miembro registre 1200 horas de trabajo de campo por año. Con esta cantidad de tiempo involucrado con otros miembros del Salón del Reino, no es de extrañar que hacen relaciones profundas entre los miembros. Esta es una poderosa herramienta de retención, al igual que la memorización de todas las enseñanzas de los testigos de Jehová.

Note varias cosas: 1. A los miembros se les dice qué leer, qué creer, y no cuestionar la autoridad. 2. A los miembros no se les permite tener o crear relaciones profundas con nadie fuera de la organización. 3. Los miembros desarrollan un profundo sentido de pertenencia a través de muchas horas de intenso trabajo y estudio. 4. Los miembros son amenazados con la expulsión y la excomunión si violan las enseñanzas y prácticas de los testigos de Jehová. 5. No se les permite leer o escuchar ningún material escrito contra la Atalaya y los testigos de Jehová.

Todas estas son características de las sectas y cultos de control mental. Hay peligro en pertenecer a grupos como estos. Desafortunadamente, hay muchas personas que se casan por error con los testigos de Jehová y se encuentran en situaciones desagradables y psicológicamente dañinas.  Si usted, o alguien que conoce, se encuentra en una situación como esta, recuerde que muchos han dejado esta organización y han aprendido a tener vidas saludables y satisfactorias. 

Durante las próximas sesiones de blog, cubriré algunas de las creencias promovidas por la Atalaya y los testigos de Jehová.  También presentaré respuestas bíblicas a sus enseñanzas erróneas.  Así como este hombre dejó a los testigos de Jehová y se convirtió en un verdadero testigo de Jehová, otros también lo pueden hacer.

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Tenemos un largo camino por recorrer